¿Quién dijo que “hay que ser Gerente”?
A lo largo de los años me encontré, en reiteradas oportunidades, con el juicio (o pre-juicio) que el camino adecuado para crecer en una organización era “llegar a ser Gerente”. Dentro de esta creencia se encuentran dos cuestiones fundamentales: el hecho de serlo y el de “llegar a” como si ese lugar “privilegiado” fuera un destino final.
Está claro que alcanzar un nivel gerencial supone (o al menos para mí debería suponer) un camino recorrido- determinada experiencia laboral, un puñado de competencias desarrolladas, ciertos conocimientos – y representa, dentro de una estructura tradicional, un rol jerárquico dentro de la organización.
Ahora bien, ser Gerente ¿es la única forma de crecer en una organización?
Si por un momento pudiéramos valorar el rol de un Experto o Especialista en un proceso o tecnología veríamos caer estrepitosamente ese prejuicio.
Un Especialista técnico recorre el mismo camino en lo que respecta a su experiencia laboral, competencias y conocimiento. Su rol y expertise también representan un valor agregado diferencial para el negocio.
Simplemente sostenemos con vehemencia aquello que alguna vez escuchamos y pensamos… y no cuestionamos esas creencias, solo actuamos en consecuencia.
Tengo la absoluta convicción que hay varias formas de crecer en una organización. Podemos diseñar una carrera gerencial pero también proyectar una carrera técnica y ambas son válidas y necesarias para el negocio.
Para qué sostener una creencia que nos lleva a que perdamos todos: el negocio, las personas, la organización y los procesos. Para qué forzar a un Experto a transformarse en Gerente y liderar un equipo, si su expertise y su pasión están claramente asociado a lo técnico.
Poder discernir qué tipo de carrera es la más “adecuada” en cada caso, nos permite maximizar el potencial de las personas y por lo tanto los negocios y así Todos Ganamos!
Silvina Fernandez Cardiello
(Consultora Senior)
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