COVID-19, lo que sabemos es que no sabemos
Hoy en día el gran protagonista de nuestra vida cotidiana, personal y laboral, es sin lugar a dudas el Coronavirus. Este rol lo tiene bien ganado a nivel internacional, debido a la gran capacidad de contagio, la falta de una vacuna y/o medicamento efectivo para combatirlo, el descalabro que genera en los sistemas de salud de los países, la crisis económica mundial y por supuesto la pérdida de vidas humanas.
Es impresionante la cantidad de información que se genera día a día ó mejor dicho minuto a minuto de diversas fuentes, la mayoría de ellas sin ningún tipo de soporte científico, diciendo que ya hay un medicamento 100% eficaz, que la vacuna sale para septiembre, que las clases reinician en Agosto, y podríamos seguir enumerando muchas más.
Mientras tanto nos encontramos transitando un camino de incertidumbre, sin poder declarar que no sabemos aún muchas cosas….cuándo y cómo volveremos a la “normalidad”, si es que va ser la misma que antes de la pandemia; qué pasa si me contagio; cuándo va a existir una cura para esta cepa de coronavirus; la educación de mis hijos, sobrinos, familiares será la misma; el vínculo familiar será igual; cómo será mi trabajo una vez que termine la pandemia; entre tantas otras. Todas estas incertidumbres activan diferentes emociones en cada uno de nosotros, y ellas marcan la forma en cómo vivimos estos momentos impensados hace 3 meses atrás, ya sea de manera positiva ó negativa.
En este contexto, hay cosas que si sabemos y podemos hacer… podemos cuidarnos a nosotros mismos y a los demás, ser más solidarios, reflexionar sobre lo que estamos viviendo, analizar nuestra escala de valores y accionar para hacer cosas diferentes para lograr resultados diferentes.
Las organizaciones tienen un rol fundamental en este contexto, que es acompañar a los colaboradores a transitar este momento, no sólo desde el aspecto económico sino también emocional, manteniendo una comunicación fluida y aprovechando la coyuntura para desarrollar nuevas habilidades y conocimientos.
Llegó el momento de romper paradigmas, empezar a ver otras formas de desarrollarnos, desaprender y aprender en este nuevo contexto que se nos presenta.
Afortunadamente existen metodologías y herramientas online para lograr esos objetivos, entre las que se destacan: coaching 1 a 1 y grupal, gamificación, talleres en vivo y/o grabados, campus virtuales, contenidos digitalizados y consultoría. El éxito o fracaso de éstas depende en gran medida de la capacidad de análisis de los consultores para entender las necesidades del cliente y el diseño a medida de la propuesta de valor en función de esas necesidades.
Varios de nuestros clientes ya iniciaron este proceso con muy buenos resultados…. y tu organización, continua en la incertidumbre…?.
“Hay tres tipos de personas en el mundo: los que hacen que las cosas ocurran, los que ven cómo ocurren las cosas y los que se preguntan qué ocurrió.” N. Butler.
Ariel Jasovich
(Socio Gerente TDO)
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